Íñigo Jiménez - Индекс потомака
Из пројекта Родовид
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Титуле : Conde de Bigorra
Титуле : Conde de Sobrarbe
Свадба: <2> ♀ Oneca Velázquez [?]
Титуле : изм 820 и 852, Pamplona, Marca Hispánica, Rey de Pamplona, 1º
Смрт: 870, Marca Hispánica
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31/3 <2+2> ♀ Assona Iñiguez [Íñiga]Assona Íñiguez married her father's half-brother, Musa ibn Musa ibn Fortun ibn Qasi, lord of Tudela and Huesca
Ассона Иньигес вышла замуж за единокровного брата своего отца, Муса ибн Муса ибн Фортун ибн Каси, лорда Туделы и Уэски.García's death has been subject to scholarly disputeШаблон:Ref!, a result of a paucity of records from the last years of his reign. The lack of subsequent mention of him after 870 led to the suggestion that he died in that year, and as his heir was in the hands of his enemies, it was argued that García Jiménez then governed the kingdom as regent. García's son, Fortún Garcés, is then made to succeed upon his released in 880. There is, however, no evidence for such a regency, and Sanchéz Albornoz has cited evidence that García was still living at the time of his son's return. Thus it is likely that Balparda was reporting accurate tradition when he suggested García and ally Umar ibn Hafsun, fought a battle at Aybar against the troops of Emir of Córdoba in 882, García dying there (although the age provided him, 84 years, is clearly exaggerated).
Смерть Гарсиа является предметом научных споров Шаблон:Ref! Из-за нехватки записей за последние годы его правления. Отсутствие последующего упоминания о нем после 870 года привело к предположению, что он умер в том же году, и поскольку его наследник находился в руках его врагов, утверждалось, что Гарсиа Хименес тогда управлял королевством как регент. Затем сын Гарсиа, Фортун Гарсес, становится преемником после его освобождения в 880 году. Однако нет никаких доказательств такого регентства, и Санчес Альборнос привел доказательства того, что Гарсия все еще жил на момент возвращения сына. Таким образом, вполне вероятно, что Балпарда сообщил точную традицию, когда он предположил, что Гарсия и его союзник Умар ибн Хафсун сражались в битве при Айбаре против войск эмира Кордовы в 882 году, Гарсия умер там (хотя указанный ему возраст - 84 года, очевидно, преувеличены).
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71/4 <3+3> ♂ w Lubb II ibn Musa [Banu Qasi] 82/4 <3+3> ♀ Awriya ibn Musa [Banu Qasi]Титуле : изм 833 и 844, Marca Hispánica, Conde de Aragón
Смрт: 912
Место становања : 860, Còrdoba, capturado por Mohamed I
Титуле : изм 882 и 905, Rey de Pamplona
Смрт: 906, Pamplona, Monasterio de Leyre
Смрт: 870, Córdoba, Al-Andalús, asesinado
Свадба: <17!> ♀ Velasquita Garcés [Íñiga]
Смрт: 873, Cruicified in Cordoba
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311/5 <16+12> ♂ Aznar Sánchez de Larraún [Íñiga]Свадба: <26!> ♀ w Oneca Fortúnez [Íñiga] b. 847проц d. > 890, Pamplona, segundo matrimonio de Oneca Fortúnez
Смрт: 870
Свадба: <13> ♂ Abd Allah I ibn Muhammed (Abd Allah I) [Bani Umayyah] b. 11 јануар 844 d. 15 октобар 912
Свадба: <31!> ♂ Aznar Sánchez de Larraún [Íñiga] , Pamplona, segundo matrimonio de Oneca Fortúnez
Смрт: > 890
Титуле : León (España), Rey de León
Свадба: <14> ♀ w Elvira Menéndez [Gutiérrez] , Gallaecia, primer matrimonio de Ordoño
Свадба: <15> ♀ Argunta González ? (o Gutiérrez) [?] , segundo matrimonio de Ordoño
Свадба: <73!> ♀ w Beatrice de Navarre [Jiménez] b. 900 d. 959
Смрт: јун 924, León (España)
Смрт: ~ 935
Смрт: ~ 950
Смрт: ~ 929
Смрт: 933
Свадба: <17> ♀ Sancha Garcés [Jimena]
Титуле : изм 893 и 922, Marca Hispánica, Conde de Aragón
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431/6 <22+13+26!> ♂ Muhammad Ibn Abdallah [Bani Umayyah]Смрт: 905
Свадба: <20> ♂ w Sancho Garcés I de Pamplona (Navarra) [Jiménez] b. 865 d. 11 децембар 925
Смрт: 15 октобар 958, Pamplona, Marca Hispánica
Титуле : изм 926 и 929, Rey de Galicia
Смрт: 929
Свадба: <21> ♀ Adosinda Gutiérrez [Galaica] , primer matrimonio de Ramiro
Титуле : изм 931 и 951, Rei de Leão
Свадба: <69!> ♀ w Urraca de Pamplona [Jimena] d. 956, segundo matrimonio de Ramiro
Смрт: јануар 951
Титуле : Reina de Pamplona
Свадба: <22> ♂ Sancho Macerátiz [?]
Свадба: <64!> ♂ García Sánchez I de Pamplona (Navarra) [Jimena] b. 919 d. 22 фебруар 970
Титуле : изм 922 и 943, Condesa de Aragón
Смрт: 972, Aibar
Hija del conde aragonés Galindo Aznar II y de su segunda esposa Sancha, hija a su vez de García Jiménez y Onneca Rebelle de Sangüesa y, por tanto, hermanastra paterna de Sancho I Garcés, era a la vez por vía materna prima carnal de su citado marido.
Aunque en circunstancias concretas desconocidas, con ella el condado de Aragón quedó integrado en la Monarquía pamplonesa que se extendió así a través de los valles del curso superior de los ríos Aragón y Gállego hasta los confines de Sobrarbe. No hay constancia de que el condado hubiese sido reclamado, por ejemplo, por su hermanastra mayor Toda, nacida del primer matrimonio del referido Galindo Aznar II en su primer matrimonio con Acibella de Gascuña, y esposas más adelante del conde Bernardo de Ribagorza. Sus nupcias con el joven monarca pamplonés debieron de celebrarse hacia 935 o poco antes, justo una coyuntura política de negociaciones y paces con Abderramán III mantenidas por la reina Toda, viuda de Sancho I Garcés, que en una entrevista celebrada en Calahorra (verano de 934) logró el reconocimiento formal por parte el califa cordobés de García I Sánchez como “señor” de Pamplona y sus tierras riojanas de Nájera. Sin embargo, el monarca pamplonés iba a volver a orientar muy pronto su política hacia el reino de León y a este efecto, para reforzar los estrechos nexos familiares ya existentes entre las dos dinastías regias hispano-cristianas, tomó hacia 941 como nueva esposa a Teresa, hija del rey Ramiro II de León, tras haber repudiado a Andregoto, alegando al parecer la nulidad canónica de su matrimonio con ella por impedimento del parentesco ya reseñado y nada frecuente en el círculo fuertemente endogámico de los príncipes coetáneos. La ruptura no iba a impedir, sin embargo, que el hijo nacido de las disueltas nupcias, el futuro Sancho II Garcés, heredara en su momento el reino paterno (970) y contara además con la fidelísima asistencia de su hermanastro Ramiro Garcés el de Viguera, fruto del segundo matrimonio de García I Sánchez con la citada Teresa Ramírez.
Aunque repudiada, Andregoto conservó el título de Reina y como tal encabezó, por ejemplo, junto con Sancho II Garcés y su mujer Urraca Fernández (29 de junio de 971) la donación de la villa de Javier de Martes, villa oscense próxima a Berdún, a favor del monasterio de San Pedro de Sirena. Instalada en Lumbier, donde “reinaba” (“regina Endergoto in Lumberri”, se consigna expresamente en un documento) y favorecida con una digna dotación de bienes raíces, intervino como mediadora en un conflicto de intereses a favor de la cercana iglesia de Santa María y San Saturnino de Lisabe. Convivió, quizá, algún tiempo con ella su hermana Belasquita, casada con un miembro de la aristocracia local, Enneco López de “Estigi” y Celigueta, esta última villa a escasa distancia también a Lumbier. Cabe finalmente suponer que en este retiro y con la memoria excepcional de bastantes ancianas hizo poner por escrito los antecedentes de su estirpe aragonesa hasta la generación de su tatarabuelo Aznar Galindo I, el primer conde conocido de Aragón, coetáneo de los soberanos francos Carlomagno y su hijo Ludovico Pío, a quienes cabe atribuir la institución de aquel condado hispano-pirenaico.
Bibl.: J. M. Lacarra, “Textos navarros del Códice de Roda”, en Estudios de Edad Media de la Corona de Aragón (Consejo Superior de Investigaciones Científicas-Escuela de Estudios Medievales), 1 (1945), págs. 230-250; E. Levi-Provençal, “España musulmana hasta la caída del califato de Córdoba (711.1031 d. C.)”, en R. Menéndez Pidal (dir.), Historia de España, t. 4, Madrid, Espasa Calpe, 1950 (5.ª ed., 1985); A. Ubieto Arteta, “Doña Andregoto Galíndez, reina de Pamplona y condesa de Aragón”, en Actas del Primer Congreso Internacional del Pirineo. San Sebastián, septiembre de 1950, Zaragoza, Consejo Superior Investigaciones Científicas-Instituto de Estudios Pirenaicos, 1952, págs. 1-19 (separata); R. d’Abadal i de Vinyals, Els comtats de Pallars i Ribagorça, t. 1, Barcelona, Institut d’Estudis Catalans, 1954, págs. 71-115; A. Ubieto Arteta, “Los reyes pamploneses entre 905-970”, en Príncipe de Viana, 24 (1963), págs. 77-82; “La elaboración de las Genealogías de Roda”, en Miscelánea José María Lacarra de Miguel, Zaragoza, Anúbar Ediciones, 1968, págs. 457-464; J. Á. García de Cortázar, El dominio del monasterio de San Millán de la Cogolla (siglos x a xiii) introducción a la historia rural de Castilla altomedieval, Salamanca, Universidad, 1969; J. M. Lacarra, Historia política del reino de Navarra desde sus orígenes hasta su incorporación a Castilla, t. 1, Pamplona, Caja de Ahorros de Navarra, 1972, págs. 65-178; J. Goñi Gaztambide, Historia de los obispos de Pamplona, t. 1, Pamplona, EUNSA, 1979, págs. 92-105; M. Díaz y Díaz, Libros y librerías en La Rioja altomedieval, Logroño, Instituto de Estudios Riojanos, 1979; M.ª J. Viguera y F. Corriente (eds.), Ibn Hayyan, Crónica del califa Abdarrahman III an-Nasir entre los años 912 y 942 (Al-Muqtabis V), Zaragoza, Anúbar Ediciones-Instituto Hispano-Árabe de Cultura, 1981; A. Ubieto Arteta, Orígenes de Aragón, Zaragoza, Anúbar Ediciones, 1989, págs. 192-204, 250-263 y 283-305; L. J. Fortún Pérez de Ciriza, Leire, un señorío monástico en Navarra (siglos ix-xix), Pamplona, Institución Príncipe de Viana, 1993, págs. 73-90; A. J. Martín Duque, “El reino de Pamplona”, en M. Riu (coord.), La España cristiana de los siglos viii al xi, II: Los núcleos pirenaicos (718-1035). Navarra, Aragón, Cataluña, en J. M.ª Jover Zamora (dir.), Historia de España Menéndez Pidal, t. 7-2, Madrid, Espasa Calpe, 1999, págs. 60-72, 107, 117, 212-219, 237 y 278-299.
Ángel Martín Duque.
http://dbe.rah.es/biografias/9800/andregoto-galindezТитуле : изм 925 и 931, Rey de León
Титуле : изм 929 и 931, Rey de Galicia
Смрт: 933, Monasterio de San Julián
7
601/7 <40> ♂ Zaydan Ibn Zayd [?]Титуле : изм 15 октобар 912 и 16 јануар 929, Caliph of Cordoba
Титуле : од 929, calife de Cordoue
Смрт: 15 октобар 961
Свадба: <32!> ♂ Ordoño II de León [Astur] b. 871 d. јун 924
Свадба: <25> ♂ w Álvaro Herrameliz [Lantarón] d. 931
Свадба: <26> ♂ Fernán González [Cantabria] b. 910 d. 970
Титуле : 932, Comtesse de Castille
Смрт: 959
Свадба: <27> ♀ Andregoto Galindez [?]
Свадба: <46!> ♀ Andregoto Galíndez [Galindo] b. 900 d. 972
Титуле : изм 925 и 970, Pamplona, Rey de Pamplona
Титуле : изм 943 и 970, Conde de Aragón
Свадба: <68!> ♀ Teresa de León [Astur]
Смрт: 22 фебруар 970, Pórtico de La Pequeña Iglesia de San Esteban, En El Castillo de Monjardín.
Sucedió a su padre cuando contaba solamente cinco o seis años de edad. Conforme a una costumbre seguramente tradicional, fue puesto como pupilo (creato) al cuidado de un ayo o “eitán”, en este caso Jimeno Garcés, su tío primero por partida doble, el pariente más próximo de la familia regia y encargado por ello de ejercer transitoriamente en su nombre las funciones propias del monarca. Llegado a la mayoría de edad para el desempeño efectivo de la potestad regia (potestas regia), entonces a los catorce años, su madre Toda se entrevistó con el califa ‘Abd al-Raḥmān III y logró arteramente que lo reconociera como “señor” de Pamplona y sus tierras riojanas de Nájera, alegando al parecer sus lazos familiares, pues el soberano cordobés era nieto de Ónneca, madre de la propia Toda. En el tratado concertado a tal efecto (Calahorra, julio de 934) se renovaban en cierto modo las cláusulas de fidelidad y subordinación política del antiguo pacto, pero no se contemplaba ya el signo permanente de dependencia teórica que era el tributo anual.
Casó tempranamente con Andregoto, hija del último conde aragonés, Galindo II Aznar, cuyos dominios fueron incorporados en circunstancias desconocidas al espacio monárquico pamplonés, extendido así a los valles del curso superior de los ríos Aragón y Gállego hasta los confines de Sobrarbe. Sin embargo, su trayectoria política iba a orientarse principalmente hacia el oeste en estrecha sintonía y comunidad de proyecto político con el reino de León, como consecuencia de los estrechos lazos de parentesco y solidaridad anudados entre las familias reinantes de ambas monarquías. Como colofón de la estrecha colaboración bélica en tierras najerenses sobre todo, Sancha, hija de Sancho I Garcés y Toda, había sido dada como esposa a Ordoño II. Por añadidura la misma reina pamplonesa había casado a su hija Ónneca con el nuevo monarca leonés Alfonso IV (925-931), hijo del mismo Ordoño, y luego a Urraca con Ramiro II (931-951), hermano y sucesor del anterior. Un vástago de este matrimonio, Sancho I “el Craso”, lograría más adelante (956) la sucesión en la corona de León, que se vería obligado recobrar frente a Ordoño IV, otro nieto de Toda. Contó para ello con el tenaz apoyo de su abuela pamplonesa, quien no tuvo reparos en volver a recurrir, ahora en el propio palacio califal, ante su pariente ‘Abd al-Raḥmān III para obtener el socorro militar necesario para hacer realidad tal empeño (959).
Por lo demás, para reforzar los nexos familiares y políticos con León, García I Sánchez había tomado hacia el año 941 como segunda esposa a Teresa, hija de Ramiro II, al parecer tras haber desistido del matrimonio concertado con una hija del conde barcelonés Suñer. Mas el repudio de Andregoto no impidió que su hijo Sancho II Garcés, nacido de las disueltas nupcias, heredara en su momento el reino paterno (970) y contara con la eficaz asistencia de su hermanastro Ramiro Garcés “el de Viguera”, fruto del aludido segundo matrimonio.
Por lo demás, las relaciones pamplonesas de parentesco se habían extendido también a las familias de magnates cristianos que regían las cercanas circunscripciones dependientes del reino leonés así como las que flanqueban los dominios pamploneses por el este y el norte. Viuda tempranamente de Ordoño II, la citada Sancha, hija de Sancho I Garcés y Toda, contrajo sucesivas nupcias con Álvaro Herrameliz, conde de Álava, y hacia los años 931-932 con Fernán González, conde de Castilla. Su hermana Belasquita tuvo como esposos primero a Momo, conde de Vizcaya, y luego a Galindo, hijo del conde Bernardo de Ribagorza. La conexión castellana cobraría especial importancia durante el último tercio de siglo, cuando León se iba a debatir angustiosamente entre agudos problemas internos y los más duros asaltos musulmanes. De momento, el citado conde Fernán González, viudo ya de la pamplonesa Sancha, tomó como nueva esposa a Urraca, hija de García I Sánchez y Teresa , y su propia hija Urraca Fernández, viuda sucesivamente de los reyes leoneses Ordoño III y Ordoño IV, casó hacia el año 962 con el futuro Sancho II Garcés, primogénito y sucesor de García I Sánchez.
Debe añadirse, entre las expresiones de la profusa política matrimonial de la familia regia de Pamplona en este período, el nexo trenzado con la dinastía condal de Gascuña a través de la unión de Urraca, hija de García I Sánchez y viuda ya de Fernán González, con el conde Guillermo Sánchez, cuyo hijo Sancho Guillermo iba a frecuentar luego el palacio itinerante de los reyes pamploneses hasta tiempos de Sancho el Mayor. Se trataba de momento en este caso de relaciones de buena vecindad, como las anudadas anteriormente por el conde aragonés Galindo II Aznar en su matrimonio con Acibella, hija del conde García Sánchez de Gascuña, abuelo a su vez del citado Guillermo Sánchez. En ese mismo sentido se puede interpretar el enlace de Lopa, una de las hijas naturales de Sancho Garcés I, con un conde de Bigorra. Por lo demás, basta resaltar el significativo cese de los lazos de parentesco establecidos en el siglo anterior por los príncipes o “señores” de Pamplona y los condes de Aragón con magnates musulmanes de la “Frontera Superior”. Es cierto que la reina Toda, como se ha apuntado, explotó políticamente, siempre que le convino, las primeras nupcias de su madre Onneca, hija de Fortún Garcés, con el emir Abdallah, abuelo a su vez de ‘Abd Al-Raḥmān III, nacido por otra parte de la unión de su padre Muḥammad con Muzna, una cautiva vascona.
Después de las conquistas de Sancho I Garcés, el creciente y poder militar y la hegemonía política del califato instaurado oficialmente en al-Andalus (929) por ‘Abd al-Raḥmān III an-Nāṣir li-Dīn Allāh, “defensor de la religión de Allāh”, iban a obligar a los monarcas pamploneses a frenar sus impulsos ofensivos y limitarse a salvar su joven reino y sus nuevas fronteras más que con las armas mediante oportunas maniobras diplomáticas. Sin embargo, no se olvidó en ningún momento el proyecto colectivo que había alentado la vertebración de la nueva formación política, y los propios reveses, contrariedades y ruinas lo fueron acrisolando comunicándole los nítidos perfiles manifiestos en las representaciones historiográficas e intelectuales que iba impulsar el siguiente monarca.
Se han referido ya las interesadas comparecencias de la reina Toda ante su sobrino ‘Abd al-Raḥmān III en Calahorra y en el propio palacio cordobés. Por la corte del siguiente califa al-Ḥaqam II (961-976) iban a desfilar sucesivas legaciones pamplonesas a fin de negociar treguas que podían evitar nuevas pérdidas de plazas fronterizas. Parece que tras la definitiva ocupación musulmana de Calahorra se desplazó un selecto grupo de magnates pamploneses (968/969) para solicitar una tregua, como la que negociarían tres años después (agosto 12 de 971) el abad Bassal y Velasco, cadí, iudex o mandatario regio de Nájera, y que seguramente se garantizó al mes siguiente enviando como rehén a Jimeno, hermano del nuevo monarca pamplonés Sancho II Garcés. Todos estos compromisos aparentemente amigables con Córdoba se realizan por pura conveniencia y desde posturas coyunturales de inferioridad y fingidas sumisiones. Resultaban pausas y humillaciones sin duda necesarias dentro de la línea política de oposición radical entre los dos irreconciliables espacios de civilización y cultura y, por parte de las sociedades astur-leonesa y pamplonesa, no suponen un repudio efectivo del programa de expansión o “liberación” cristiana de Hispania.
Quizá para atajar y castigar los asaltos fronterizos de Jimeno Garcés, tutor del monarca pamplonés, emprendió ‘Abd al-Raḥmān III la expedición que lo llevó a Calahorra y dio motivo a su mencionada entrevista con la reina Toda (934), pero a los tres años consideró que los pamploneses habían roto el pacto entonces suscrito, quizá por haber apoyado la rebelión del valí gobernador tuyibí de Zaragoza. Asoló, pues, en dos incursiones los márgenes limítrofes de los dominios de la “bárbara” Toda como narra un analista árabe. Tras el asedio y rendición de Uncastillo, a cuyo alcaide Sarracín (Saryin) dejó marchar, llevó las depredaciones por las tierras próximas, “hasta el corazón del país”, para salir por Tafalla que fue incendiada. Arrasó moradas, quemó alquerías, abatió fortalezas, taló los árboles frutales “frecuentes en aquella zona”, pero más o menos como en la campaña del año 924, halló todos los lugares abandonados y, conforme a la táctica tradicional de defensa del país ninguna unidad armada se aventuró a hacerle frente (agosto de 937). En diciembre siguiente las fuerzas cordobesas cayeron sobre el sector occidental de la frontera y en el llano presidido por la fortaleza de San Esteban (Monjardín) hicieron huir a las tropas pamplonesas y con un cuantioso botín y numerosos cautivos regresaron por la fortaleza de al-Monastir (probablemente cerca de San Adrián), “en el confín del país de Pamplona”, donde se entregaron y fueron decapitados el “conde” o alcaide, “uno de los más nobles vascones” y sus 60 compañeros. Parece que entonces la reina Toda y su hijo se avinieron a negociar el oportuno cese de hostilidades .
A los dos años García I Sánchez sumaba sus guerreros a los de Ramiro II de León para la sorprendente y espectacular victoria cristiana sobre ‘Abd al-Raḥmān III tanto en las cercanías de Simancas (6-8 de agosto de 939) como en la subsiguiente emboscada tendida a las fuerzas califales en retirada por el paraje de al-Handaq, Alhándega. La contribución pamplonesa debió de ser tan notable que los ecos llegados hasta el lejano monasterio de Saint-Gall (Suiza) se tradujeron en la pintoresca noticia que considera protagonista del memorable acontecimiento a “cierta reina llamada Toia”, es decir, la infatigable Toda. En la corte cordobesa se consideraba entonces al monarca pamplonés su mayor enemigo hasta el punto de puso como condición para otorgar la paz al conde barcelonés Suñer que este disolviera el ya referido compromiso matrimonial de su hija concertado con García I Sánchez I (940). Éste se había apoderado de la fortaleza de Labata, unos 20 km al nordeste de Huesca, y expugnó luego los cercanos baluartes de Sen y Men (941). Por ello el reino pamplonés quedó excluido del tratado de paz acordado poco antes por el califa con Ramiro II y sus condes y en un contraataque del siguiente año el valí Muḥammad b. Hasim recuperó dichas plazas y rechazó en las proximidades de Tudela a las tropas castellanas llegadas en socorro de los pamploneses.
El silencio de los textos invita a suponer que durante unos tres lustros discurrió una fase de calma siquiera relativa en las fronteras con el consiguiente alivio para la sociedad pamplonesa . Después de la muerte de Ramiro II (951) no habían tardado en producirse discordias por la sucesión en el trono leonés. Alentado por su abuela Toda había tratado Sancho I de suplantar a su hermanastro Ordoño III. Es cierto que, solo con la muerte de este último (956, septiembre), vio hacerse realidad tal pretensión, con ayuda presumiblemente de su tío García I Sánchez. Cuando a finales del siguiente año fue desplazado por su primo Ordoño IV, Toda entabló las negociaciones coronadas por su mencionada entrevista con ‘Abd Al-Raḥmān III en el palacio cordobés (958). Como acompañante de su madre y su primo, el soberano pamplonés aprovechó tal vez la ocasión para reajustar la tregua interrumpida, al parecer, el año anterior con la expedición del caíd o general Galib, quien “asoló completamente los llanos que obedecían a García hijo de Sancho y, después de haber arruinado las poblaciones, regresó victorioso”.
Las disensiones entre los príncipes cristianos, que evidentemente favorecían al monarca cordobés, no concluyeron con la reposición de Sancho I en el reino de León por un ejército musulmán (959). Por haber apoyado al derrocado Ordoño IV, yerno suyo, el conde castellano Fernán González fue apresado (960) y retenido en Cirueña durante un año por el monarca pamplonés, pero el nuevo califa al-Ḥakam II reclamó inmediatamente su entrega. Viudo ya de la citada Sancha, hermana de García I Sánchez, el enlace matrimonial del conde ahora con su hija Urraca significaría la reconciliación de los príncipes cristianos, que de tal suerte quedaban todavía más estrechamente emparentados entre sí. No tardó en producirse una enérgica e insistente reacción cordobesa y Galib condujo entre los años 963 y 967 sucesivas campañas contra la frontera castellana del Duero, en alguna de las cuales pudo haber llegado hasta tierras pamplonesas. Se ha pensado así por algún autor que en la primera se tomó por asalto Calahorra pero en todo caso, el estado de guerra culminaría con la reafirmación del dominio musulmán en todo el valle del Cidacos y la consiguiente restauración del recinto amurallado de aquella ciudad (agosto de 968). Con ello la frontera najerense ganada por Sancho I Garcés retrocedía así durante casi tres cuartos de siglo hasta al valle del Leza y el Jubera y de nuevo debió de optarse el mismo año por la negociación con Córdoba de una tregua con la duración habitual de tres años.
No obstante, todos los reveses, la naciente monarquía pamplonesa se había consolidado definitivamente, había ganado un prestigio sorprendente y estaba desarrollando un pensamiento político que se pondrá de manifiesto sobre todo en la siguiente generación. Resalta, en primer término, el vigor de un linaje que por línea paterno-filial directa de primogenitura iba a transmitir durante seis generaciones los poderes y atributos de la realeza y, con ellos, los nombres Sancho y García, como símbolo de la gloria y los carismas atribuidos al epónimo fundador de una familia de reyes. Había desarrollado una tupida red de relaciones de parentesco que suponen no solo una notoria capacidad de maniobra política, sino también la existencia de un programa ideológico especialmente operativo precisamente en los frecuentes infortunios de las guerras con el islam. Se había esforzado en conservar los dominios heredados de su progenitor, pero no había podido impedir que los musulmanes volvieran a adueñarse de la ciudad de Calahorra. Recibió cristiana sepultura en el pórtico de San Esteban de Deyo (Monjardín), el simbólico panteón regio inaugurado por su padre. Sus favores y predilección contribuyeron decisivamente al desarrollo de los grandes monasterios de San Salvador de Leire y, sobre todo, de San Martín de Albelda y San Millán de la Cogolla.
Como ya se ha anticipado, de la frustrada unión conyugal de García I Sánchez con Andregoto había nacido su primogénito y sucesor el futuro Sancho II Garcés. Fueron fruto de su matrimonio con Teresa, hija del monarca leonés Ramiro II, dos hijos varones, Jimeno y Ramiro, al que la historiografía ha atribuido como sobrenombre “el de Viguera”; su hija Urraca, como antes su tía Sancha y conforme se ha señalado también, casó con el mencionado conde Fernán González de Castilla tras cuyo fallecimiento contraería nuevas nupcias con el conde Guillermo Sánchez de Gascuña.
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Ángel Martín Duque.
http://dbe.rah.es/biografias/10260/garcia-i-sanchezСвадба: <101!> ♀ Urraca de Castille [Castille] d. 1007
Титуле : изм 958 и 960, Rey de León
Смрт: 960, Córdoba
Свадба: <101!> ♀ Urraca de Castille [Castille] d. 1007
Титуле : изм 951 и 956, Rey de León
Смрт: август 956, Zamora
_FA1: 15 мај 930, participó junto a su marido en una donación al obispo Cixila y al monasterio de San Cosme de Abellán.
Смрт: 931
Смрт: јануар 941
Вера : 946проц, Palat del Rey, religiosa del Monasterio de San Salvador
Смрт: 986изр
Свадба: <101!> ♀ Urraca de Castille [Castille] d. 1007
Титуле : изм 970 и 994, Rey de Pamplona
Титуле : изм 970 и 994, Conde de Aragón
Смрт: децембар 994изр
Сахрана: Nájera, La Rioja, España, Iglesia del Monasterio de Santa María La Real
Свадба: <28> ♀ w Teresa Ansúrez [Beni Ansúrez] b. < 943 d. 25 април 997
Титуле : изм 956 и 958, Rey de León
Титуле : изм 960 и 966, Rey de León
Смрт: 966
Смрт: 956
Титуле : Conde de Tafalla
Титуле : 1085, Conde de Erro
Смрт: изм 1127 и 1128
8
1081/8 <66+101!> ♀ Teresa de León [Astur]Вера : Monja
Титуле : comte de Comminges
Смрт: 940
Титуле : изм 15 октобар 961 и 1 октобар 976, Caliph of Cordoba
Смрт: 16 октобар 976
Титуле : Conde de Álava
Свадба: <32> ♀ Ava de Ribagorza [Ribagorza]
Титуле : изм 970 и 995, Conde de Castilla
Смрт: 995, Córdova
Сахрана: Burgos, Monasterio de San Pedro de Cardeña
Титуле : изм 970 и 9 јул 981, Viguera, La Rioja, España, Rey de Viguera, I
Смрт: 9 јул 981
Свадба: <72!> ♀ Velasquita Ramírez [Astur]
Титуле : изм 982 и 984, Rey de Galicia
Титуле : изм 984 и 999, rey de León
Смрт: септембар 999
Титуле : Conde de Aragón, bajo el nombre de García III.
Свадба: <34> ♀ Ximena Fernandez [Núñez de Cea] b. 970 d. 1035
Титуле : изм 994 и 1004, Rey de Pamplona
Смрт: 1004
La historiografía moderna le ha aplicado sin mayor fundamento el sobrenombre de “El Tremuloso”, “Trémulo” o “Temblón”, tomado de la cronística medieval que lo identificaba con su padre del mismo nombre. Fue el primogénito y sucesor de Sancho II Garcés y su esposa Urraca Fernández, hija del conde Fernán González de Castilla y viuda antes sucesivamente de dos reyes leoneses Ordoño III y Ordoño IV. Aparece documentado por primera vez a los siete años de edad como confirmante de una donación de sus padres al monasterio de San Millán de la Cogolla (14 de julio de 972). Se hizo cargo de la corona y la potestad regia (potestas regia) en los primeros meses de 994 cuando estaba próximo a cumplir su tercera década de vida, es decir, en la plena madurez isidoriana del hombre de aquella época. La monarquía pamplonesa y sus gentes como el resto de la España cristiana padecieron durante su vida un cúmulo creciente de inquietudes, sobresaltos y auténticos desastres que, sin embargo, no parece que se percibieran en las altas esferas eclesiásticas en clave escatológica como una “obsesión por el fin del mundo” a pesar de las copias del tratado escatológico de Beato de Liébana, el “Comentario del Apocalipsis”, existentes entonces en el tesoro librario de San Millán de la Cogolla. Con todo, para los dominios del Reino de Pamplona el período que tuvo como bisagra el cambio de milenio constituye asimismo un paréntesis de silencio cronístico, como si sus gentes estuviesen atravesando en aquellos años de pesadilla una especie de “túnel del tiempo histórico”, una penuria de informaciones autóctonas prolongada durante más de dos siglos. Ni siquiera se conocen, por ejemplo, las circunstancias ni el momento preciso del fallecimiento de Sancho II Garcés y mucho menos del de su hijo y sucesor, García II Sánchez, cuya figura se desvanece de la memoria histórica a partir del 999, como también, por ejemplo, las de su hermano Gonzalo y el obispo pamplonés Sisebuto, tan distinguido en la actualización escrita del acervo historiográfico y cultural pamplonés.
Después de más tres décadas de pugnas fratricidas y cruentas por la realeza incluso con injerencias musulmanas en ellas, se había reafirmado sobre el trono leonés Vermudo II (985). Había soportado este monarca las más profundas y asoladoras embestidas de las huestes del “mayordomo de palacio” o ḥāŷib cordobés Almanzor que desfilaron victoriosas por los núcleos de población más representativos del reino, como León, Astorga e incluso Compostela y su santuario del apóstol Santiago. De poco sirvió entre tanto la gallarda defensa de la frontera leonesa del curso superior del Duero protagonizada por el mencionado conde García Fernández de Castilla, vencido y muerto finalmente a manos de lo sarracenos (995). Y todavía en el mismo torbellino de calamidades falleció el propio Vermudo II (999) dejando un heredero menor de edad, Alfonso V, en el mismo año precisamente en que desaparecía sin dejar rastro su primo materno García II Sánchez, sucedido también por un hijo menor de edad, Sancho III Garcés el Mayor. Cuando García II Sánchez comenzó su breve reinado de apenas un lustro, la prórroga de la última tregua con los musulmanes había requerido poco antes la presencia en Córdoba (993) de un miembro de la familia regia, en este caso de su segundo hermano Gonzalo Sánchez, encargado de conquistar “el cariño” de Almanzor y dar pruebas cumplidas de obediencia. Se trataba de otro compromiso aparentemente amigable con Córdoba realizado por mera conveniencia y en circunstancias de evidente inferioridad militar. Resultaba una pausa más de humillación sin duda necesaria dentro de la línea política de oposición radical entre los dos irreconciliables espacios de civilización y cultura, cristiandad e islam. Y por esto tanto para la sociedad pamplonesa como para la leonesa no suponían tales negociaciones y acuerdos un repudio efectivo del programa de “liberación” cristiana de la Hispania irredenta. Desde sus altivas muestras de hegemonía, el todopoderoso ḥāŷib cordobés trataba por su lado de evitar las eventuales conjunciones de de sus enemigos natos basadas en los permanentes lazos de solidaridad religiosa y familiar. Con la desaparición de Sancho II Garcés la corte cordobesa debió de considerar cancelada la citada tregua renovada el año anterior tan precariamente como las anteriores. En todo caso, hacia principios del verano del propio año 994 la furia musulmana se desató redoblada por las riberas del Ebro y, desviándose hacia el norte, el ejército de Almanzor avanzó profundamente hasta los muros de la vieja ciudad de Pamplona, cuna simbólica y corazón del reino de su nombre, rendida al cabo solamente de cinco días de asedio. Las acostumbradas promesas de sumisión y lealtad política por parte de nuevo monarca lograron una vez más un breve alivio en los fragores bélicos. Cuando estaba a punto concluir el trienio habitual de la tregua (997) y al tener noticia del ataque contra Calatayud y la muerte de un prócer del linaje tuyibí que regía la gran región de Zaragoza por una partida de caballeros salida de los dominios pamploneses, respondió Almanzor con la matanza de medio centenar de cautivos del reino pirenaico retenidos en Córdoba como rehenes, uno de ellos hecho sacrificar a manos del niño de doce años ‘Abd al-Raḥmān “Sanchuelo”, el sobrino carnal por vía materna de García II Sánchez. Éste tuvo que avenirse a solicitar una nueva tregua y liberar a los presos musulmanes que se hallaban en su poder. En esta ocasión la paz solamente duró dos años y a continuación se sucedieron tres o, probablemente, cuatro campañas más. En una profunda embestida las huestes sarracenas remontaron el curso de los ríos Aragón o el Ega para volver a alcanzar sobre Pamplona, que en esta ocasión fue completamente arrasada (999) y no debió de quedar piedra sobre piedra de la iglesia catedralicia de Santa María, que sin duda había sido reconstruida después de las ruinas sembradas tres cuartos de siglo atrás por la famosa campaña de ‘Abd al-Raḥmān III. Al cabo de casi cien años más tarde todavía se iba a evocar patéticamente la desolación de la sede episcopal cuyo propio nombre había estado a punto de ser borrado de las páginas de la historia. De la siguiente campaña se sabe que discurrió por las “colinas de Pamplona”, es decir, de la región pamplonesa, y en ella entregada a las llamas cierta iglesia de Santa Cruz de ubicación actualmente desconocida. Las tropas musulmanas provenían de tierra castellana, en Cervera, cerca y al norte de Clunia (Coroña del Conde, Burgos), donde habían arrollado (1000, julio 29) a las fuerzas cristianas reunidas “desde Pamplona hasta Astorga” bajo el mando del nuevo conde castellano Sancho García, lo que permite pensar que los dos reyes cristianos, caudillos natos en semejantes tesituras, ya habían fallecido dejando además herederos menores de edad como se ha indicado. Los estragos se habían sucedido de tal forma que incluso se borró cualquier memoria sobre el momento y las circunstancias de la desaparición de García II Sánchez, prácticamente desconocido en las crónicas medievales. Como una probable muestra del desconcierto y hasta pánico general causado por semejante situación entre ciertas minorías del país, podría situarse en los dominios pamploneses el lugar de procedencia al menos de una buena parte de los monjes exiliados por aquellos años que, refugiados en la gran abadía borgoñona de Cluny, habían pedido al abad Odilón seguir en la comunidad anfitriona sus pautas litúrgicas de origen hispano-godo según noticia de un cronista borgoñón coetáneo. No debieron de ser, sin embargo, considerables las bajas sufridas por los miembros de la nobleza consagrados al oficio de las armas, pues su entrenamiento permanente y sus ágiles monturas les permitían escapar con relativa facilidad de las arremetidas del enemigo para refugiarse en las montañas cercanas. Cabe, por otro lado, suponer siquiera muy vagamente las angustias y pérdidas materiales de las poblaciones campesinas que, asentadas en núcleos próximos a las vías de comunicación preferidas en sus desplazamientos por el ejército enemigo, huirían despavoridas con sus mínimos ajuares y algunas cabezas de ganado hacia los montes más próximos, mientras las tropas cordobesas vaciaban los graneros, arrasaban las pobres viviendas e incendiaban los sembrados. Es muy probable, por lo demás, que el cuerpo del difunto monarca fuera inhumado en San Esteban de Deyo (Monjardín) donde con toda certeza descansaban los restos mortales de sus tres antecesores en la cúspide de la realeza pamplonesa. Habían ido desapareciendo sucesivamente también sus más próximos parientes varones, sus hermanos Ramiro y Gonzalo y, como su primogénito y sucesor Sancho III el Mayor sólo contaba con diez años de edad, debieron de encomendarse las funciones o potestad regia a su tíos segundos Sancho y García Ramírez, los más cercanos parientes masculinos que le quedaban. Pero en aquellos años de severa forja de su personalidad entre tantos aprietos y aflicciones, debieron de tenerlo continuamente a su lado, en mayor grado que nadie, las dos reinas viudas, su madre Jimena y, en especial, su abuela Urraca Fernández, tan baqueteada ésta en su larga y movida existencia y cuyo nombre de Urraca se había asignado a la única hermana, pues no es seguro que fuese también hermana suya la domna Sancha Sánchez que figura como confirmante detrás de sus tíos Sancho y García Ramírez en un diploma de 991.
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Ángel Martín Duque
http://dbe.rah.es/biografias/10261/garcia-ii-sanchezТитуле : 960, Condesa de Castilla
Свадба: <26!> ♂ Fernán González [Cantabria] b. 910 d. 970
Смрт: 1041
Свадба: <74!> ♂ w Ordoño IV de León [Astur] b. 924изр d. 960
Титуле : 962, Princesse de Navarre
Свадба: <63!> ♂ Sancho Garcés II de Pamplona (Navarra) [Jiménez dynasty] b. 935изр d. децембар 994изр
Титуле : 970, Reine de Navarre
Титуле : 972, Comtesse d'Aragon
Смрт: 1007